El arte nunca ha necesitado de la filosofía para existir por sí solo, en cambio no en pocas oportunidades la filosofía ha tendido a colgarse del arte para justificar su existencia.
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Ahora, cuando el filosofo o el pensador opina que es artista o pretende suplantar al creador de imágenes diciendo que el arte es idea comienza entonces la catástrofe del arte contemporáneo. Peor aún: cuando el pensador que se dice artista no domina ninguna técnica y además no sabe escribir coherentemente pues debemos entender que lo que dice y hace como arte es puro cuento. Cuento, que no obstante, para muchos jóvenes desinformados y uno que otro incauto suena bien.
Por eso yo sigo recomendando, desde lo más profundo de la conciencia artística colombiana, que lo que debemos hacer es alejarnos definitivamente de la filosofía del arte tal como es entendida hoy. Ahora, si se quiere hacer investigación sobre arte, (es decir investigación escrita que es la única que se puede hacer), perfecto, pero hay que hacerlo bien, respetando las normas éticas y formales para llegar a decir algo sencillo, serio y contundente.
La tarea es difícil porque para comenzar a construir un pensamiento personal, joven artista, son muy pocos los pensadores que vale la pena leer. En ese arduo alpinismo, vas a encontrar mucha gente que, incluso escribiendo libros, buscará transmitirte una cantidad de dudas que ellos tienen y que suelen divulgar para así justificar el dinero que ganan desde sus puestos en las academias. Tu, que eres ingenuo, absorberás sus dudas y quedaras encallado ahí, esa es la trampa que te ponen a diario. !Ese es el arte contemporáneo!
Me pregunto ?cómo puede ser que existan cursos en facultades de arte para "interpretar" el pensamiento de autores como Derrida, Deleuze, Foucault o sus rencauches ingleses de estudios culturales?, es como si se pensara que llegar a entender por qué esos personajes de farándula pusieron la coma aquí en esta frase fuera a determinar lo que tu como artista debes pensar y hacer.
Pero claro que si, las artes plásticas siguen existiendo, si queremos ver trabajos que valen la pena realizados por creadores contemporáneos olvidémonos del relativismo y de la especulación filosófica. Vamos más bien a cine a ver Avatar o leamos un buen comic. Allí, en ese tipo de producciones, el trabajo con la imagen se impone por sí solo, no necesita justificación, por eso la filosofía del arte actual, sus camarillas y mafias terminan odiando a los que si crean imágenes y si saben de técnicas artísticas.
?Qué es extremismo y no los odian? entonces por qué cuando alguien dice que estas producciones visuales son artes plásticas con mayúsculas saltan los lobos con el trajinado cuento anticapitalista y de arte efímero. Aun hoy en día siguen pretendiendo deslegitimar esas producciones comerciales como obras artísticas. Todo proviene de aquí: en las empresas universitarias, muchos de los funcionarios que enseñan arte ganando sueldos altos para un artista promueven en sus alumnos que el arte deja de serlo si es pago.
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